Esta es la historia de cómo convertimos una campaña de publicidad en una acción solidaria y comprometida.
Teníamos una startup con mi familia. Se llamaba ComerciApp: consistía en una App para promocionar el pequeño comercio. Como unas páginas amarillas, pero techies y modernas.
Habíamos logrado llegar al distrito de Sants-Montjuïc de Barcelona, y queríamos hacer una acción para darnos a conocer en el barrio. Sobretodo, nos interesaba dar una imagen positiva y beneficiosa (y realmente teníamos esa intención).
Se me ocurrió esta idea:
Un post de Facebook, en el que animábamos a las personas a realizar acciones sociales a cambio que nosotros nos comprometíamos a donar dichas cantidades en comida a bancos de alimentos locales.
Al cabo de 4 horas de su publicación, me llamó mi hermana diciéndome que el post se estaba desbordando, y que ya había más de 500 comentarios.
Realmente fue un éxito.
105.000 personas alcanzadas
2.500 “Me gustas”
1000 comentarios
800 compartidos
150 descargas de App
Aparición en medios de comunicación
Si hubiéramos tenido que lograr estos resultados con publicidad pagada, nos hubiera costado más de 1.500 €. Sin embargo, logramos unos resultados orgánicos con una inversión de 500 €, y en donde cada euro fue destinado a una buena causa. Todas las partes salieron beneficiadas en todos los sentidos. Lo que se dice una campaña de marketing redonda.
Para mí, fue un gran ejemplo de que otro marketing es posible. Un marketing donde la comunidad, la ética y la bondad cobran protagonismo, y dónde es posible que a través de un interés empresarial se termine satisfaciendo un interés común.
Al cabo de un tiempo, vi que una marca de leche hizo una campaña parecida en la que donaba litros de leche a cambio de likes 🙄 Me alegro que sirviera de inspiración para otros.